Narrar lo que haces una noche, de madrugada o en una mañana fría...
Mientras tomas café o encuentras recuerdos que dibujan sonrisas, duelen, angustian, emocionan y esperanzan... Debes escribir mientras puedas, es lo que te puede salvar de largas divagaciones en tanto existas.
Entonces se me ocurrió trazar una línea con mis dedos uniendo
los puntos en su espalda: Orión, Tauro, Casiopea o Escorpio lo habitaban; pero
esa madrugada seguramente se descubrió una nueva constelación que lleva su
nombre.